Carrera de la Esperanza Vélez-Málaga

Ayer fue un día maravilloso para la práctica del atletismo. Después de un sábado encapotado y lluvioso, las nubes dieron paso a un precioso sol que iluminó, e hizo más vistosa si cabe, esa marea de camisetas rosas contra el cáncer.
Para mí fue un día especialmente emotivo, ya que como muchos sabéis, esa enfermedad se llevó a un ser muy querido hace escasos días... cada instante de esos 5 kilómetros fue dedicado a él, allá dónde esté, seguro que feliz. Estas líneas son tuyas Tito, te echamos de menos.
En lo que respecta a lo deportivo, he de decir que la dureza del recorrido hizo mella en los que salimos "a toda pastilla", que es lo que el guión de las buenas prácticas fondistas dice que hay que hacer en una carrera tan cortita... pues eso, una cuerda nos hacía falta a más de uno para trepar aquellas pendientes... a pesar de todo, se cosechó un buen resultado (18'44'', a ritmo de 3'45'') y que pasé el siguiente.
Los ganadores fueron los de siempre. Britit con una ventaja de casi un minuto en meta y una disputada segunda plaza entre el incombustible Agustín Molina y mi compañero y amiguete Ahmed, que cedió en los últimos metros ante la veteranía del primero.
Un enorme BRAVO por el Club de atletismo de Vélez-Málaga, el cual hizo posible esa mañana cargada de alegría y esperanza.